Y el tiempo ha pasado, y si miramos atrás ya ni nos recordamos. Sentiamos el aire tan cerca, y los días eran tan breves.
Quien dijo que todo depende del tiempo, acertó. Lo impacientes que llegamos a ser, esperando esa luz que llegue y nos vuelva a iluminar.
Y un día sin pensarlo, tu vida cambia el sentido. Todo merece la pena. Te sientes capaz de todo, pero sobretodo te ves dispuesto a amar, eso que sentías que nunca volverías hacer, sin quererlo, poco a poco, vas recordandolo, vas volviendo a saborear cada una de sus letras, y sintiendo tan dentro esa sonrisa que hace tiempo escondías.
Lo fácil que son las cosas cuando alguien esta a tu lado, lo fácil que empieza a ser todo.
Ya nada te da miedo, alguien esta noche te esta abrazando entre sus brazos. Alguien esta noche recorre tu cuerpo con caricias, y tus mejillas están empapadas de besos. Y tu, viviendo ese instante. Porque al fin y al cabo, la vida es vivir compartiendo tu más sincero yo, con la persona que quieres.
No hay comentarios:
Publicar un comentario